Cuando le vayas a contar un cuento a tu hijo (a) puedes escoger dos opciones: Acudir a los libros infantiles y leerle o inventarte una historia personalizada.
En ambos casos es recomendable que estés cerca a tu hijo (a) y que te sientas parte de la historia, que seas consciente que eres el/la narrador/a principal y que de ti depende que el pequeño (a) ponga toda su atención en lo que le estás contando y enseñando.
De vez en cuando puedes animarte y escenificar el cuento. Subir o bajar la voz mientras lo narras y con la luz tenue, contar la historia como si estuviera pasando en la habitación. Te aseguro que tu hijo (a) nunca lo olvidará.
Disfruta cada momento con tus hijos (a)...Crecen rápidamente.
martes, 20 de octubre de 2009
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